Este año las carreteras contaran con dos modelos de coches 100% eléctricos de una de las marcas más potentes del mercado: Volvo. Los suecos ya anunciaron hace unos meses que iban a dar el salto definitivo a la movilidad eléctrica con el Volvo XC40 Recharge y el Volvo Polestar 2. Pero mientras estamos esperando a que estos dos coches eléctricos salgan del garaje, desde Goteborg nos anuncian que van a desarrollar su tercer modelo 100% eléctrico: el Volvo XC90 Recharge.
Nueva tecnología para el Volvo XC90 Recharge
Después de la presentación el pasado octubre del XC40 Recharge y de la del Polestar 2, presentado hace casi un año, Volvo apuesta por electrificar el SUV más lujoso que tienen. Este vehículo será desarrollado por la renovada plataforma escalable SPA2, sobre la que van a construir los vehículos de Volvo de las series 60 y 90. En ella el fabricante ha añadido a la anterior arquitectura modular SPA, las tecnologías que incorporarán sus coches de próxima generación relacionadas con la electrificación, la conectividad y la conducción autónoma. Para el buen desarrollo tecnológico, la marca se ha asociado con Nvidia, empresa californiana que desarrolla procesadores informáticos y soluciones de inteligencia artificial.
Es de esperar que el XC90 eléctrico disponga de una batería de mayor capacidad que el XC40 Recharge (78 kWh). De esta forma, este SUV eléctrico competirá de tu a tu con el futuro BMW iNext, el Audi e-tron o el Jaguar I-Pace. Aunque esta rivalidad no será real hasta el 2022, fecha en la que se prevé que salga a la carretera.
La inversión americana de Volvo
Además, este nuevo prototipo vendrá con baterías nuevas. Será construido en la fábrica de Carolina del Sur, que recibirá una inversión de 540 millones de euros (600 millones de dólares) para acoger la línea de producción de este nuevo modelo y construir unas nuevas instalaciones para fabricar baterías de coches eléctricos. En esta fábrica, inaugurada hace más de dos años, ya trabajan unas 1.500 personas en otros proyectos. Pero con esta nueva inversión se prevé que entren a trabajar muchos más profesionales y que para finales del 2021 esté lista la fábrica de baterías.
La electrificación de Volvo
Volvo no se queda atrás con la electrificación de su gama. Ya lleva unos años desarrollando el terreno para la creación de todos estos modelos que en breve saldrán a la luz. Uno de los primeros pasos fue la creación de una filial independiente junto a Geely que impulsara la producción de vehículos eléctricos de alto rendimiento. Estamos hablando de Polestar, la cual recibió a finales de 2017 una inversión conjunta de 640 millones de euros. Precisamente con Geely hace tres meses crearon una nueva filial que se encargará de crear motores de combustión modernos para implantar en los nuevos híbridos y así “despejar el camino” para centrarse en el desarrollo de su gama de coches eléctricos. Cabe remarcar que Volvo quiere que en el 2025 la mitad de las vendas de la marca sean coches eléctricos y que la otra mitad corresponda a coches híbridos e híbridos enchufables.